El Tribunal Superior de Justicia de Extremadura ha dado la razón a la Asociación de Padres de la Escuela Pública Educación Integral
en el recurso que presentó contra el nuevo currículo de Educación
Secundaria Obligatoria y Bachillerato, aprobado por la Junta de
Extremadura, en el que se reducían las horas lectivas de Religión.
En esta sentencia, el tribunal falla a favor de esta asociación de padres, "entendiendo que no es correcto el reparto de las horas" en la nueva ordenación en el horario lectivo que regulaba la Junta de Extremadura en el decreto aprobado en abril de 2016.
Así lo ha explicado la portavoz de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña,
en rueda de prensa en Mérida tras el Consejo de Gobierno, en la que ha
informado de esta sentencia, conocida en la tarde de este pasado lunes,
sobre la que ha mostrado el "respecto absoluto" del Ejecutivo regional,
aunque ha anunciado que la recurrirá a través de la presentación de un recurso de casación ante el Tribunal Supremo.
En su intervención, Gil Rosiña ha explicado que, a través de este recurso, la Junta de Extremadura busca defender que "no está vulnerando ningún derecho fundamental de la familia",
así como que el Ejecutivo regional "cumple la ley" y "no está
vulnerando la ley educativa en vigor", ni tampoco el acuerdo que existe
entre el Estado y la Iglesia Católica.
En este nuevo
currículo, aprobado en abril de 2016, la Junta de Extremadura establecía
que en la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), la asignatura de
Religión era "optativa" entre ésta o Valores Éticos, y pasaba de dos a una hora semanal, mientras que en primero de Bachillerato también se reducía de dos a una hora semanal, y en segundo no se impartía.
Así,
en este recurso, la Junta de Extremadura se reafirmará en la "necesidad
de regular, equilibrar unos horarios lectivos, no contra la Religión,
sino garantizando la Religión, pero al mismo tiempo fomentando también
valores éticos y ciudadanos", así como "garantizando la asignatura de
Filosofía", ha explicado la portavoz.
"No vulneramos la
Ley de Educación vigente en nuestro país, no vulneramos los acuerdos que
hay entre el Estado y la Santa Sede", ha reiterado Gil Rosiña, quien ha
aclarado además que el Ejecutivo extremeño "no hace este decreto contra
la Religión, sino que para garantizar la libertad de los padres que
quieren optar a la Religión", pero también la de "aquellos que quieren optar por los valores éticos".
La
portavoz del Ejecutivo extremeño ha recordado que este nuevo currículo
de ESO y Bachillerato se elaboró tras un proceso de "escucha de la
comunidad educativa, con más de 700 aportaciones", y recibió tres
recursos, uno de la Iglesia Católica, otro de una asociación de docentes
extremeños y el tercero de la Asociación de Padres y Madres de la
Escuela Pública Educación Integral.
Gil Rosiña ha
recordado que el tribunal extremeño desestimó en septiembre de 2016 el
recurso que presentó la Iglesia Católica y que argumentaba que el nuevo
decreto "vulneraba el derecho de la familia", y dio la razón a la Junta de Extremadura, un fallo que fue recurrido por la Iglesia, por lo que todavía se encuentra "vivo".
Respeto al recurso de la asociación de padres, en él se decía que "el
nuevo reparto de horas y la nueva ordenación de horas que hace la Junta
de Extremadura no es correcta", ha explicado Isabel Gil Rosiña.
Fuente: elMundo